Aerosolterapia: antes, durante y después
Es importante conocer el modo correcto de utilizar el aerosol, antes y durante el tratamiento pero, sobre todo, después de haberlo usado
Antes: evalúa adecuadamente la elección de tu nebulizador para aerosol
En el mercado hay disponibles aparatos para la aerosolterapia que utilizan varias tecnologías para nebulizar las partículas.
Independientemente del tipo de aerosol que se elija, es fundamental asegurarse de que las dimensiones de las partículas nebulizadas sean inferiores a 6 micromilímetros, para que también puedan llegar hasta las partes finales del aparato respiratorio, como los bronquios y los bronquiolos.
Durante: presta atención a la administración
Para que la administración se produzca correctamente, se recomienda sentarse en posición erecta y relajada así como evitar sofás o sillones, para no adoptar una postura que comprima las vías respiratorias. En el caso de que se tenga que administrar a niños, es preferible no realizar el aerosol mientras duermen.
Otro aspecto que habría que considerar es la elección del accesorio más adecuado: la boquilla es el accesorio más eficaz para el tratamiento de las vías aéreas bajas, mientras que, para actuar en la parte superior del aparato respiratorio, se puede utilizar el dispensador nasal. La mascarilla es el accesorio más utilizado y el más adecuado y agradable para los niños. Si se escoge la mascarilla, es necesario asegurarse de que esté bien ajustada, que los ojos queden despejados y que la persona respire profundamente por la boca.